La primera Vespa Primavera emergió en 1968. Este fue el año que vio una nueva concienciación entre la generación más joven, que de pronto quiso gritar por la libertad. Ligera, líneas innovadoras, rendimiento brillante, fácil y divertida de conducir —hace 45 años, la Vespa Primavera fue un soplo de aire fresco. Pequeña y rápida, se convirtió en uno de los modelos más longevos y deseados de la historia de la Vespa, igualmente popular en chicos y chicas.
Joven, revolucionaria tecnológicamente y ágil, con un ojo a la protección del medio ambiente del que es estrella, la Vespa Primavera es la protagonista de su época, heredando toda la frescura y disfrute de la vida que van mano en mano con la historia de un modelo que es un culto en el árbol familiar de Vespa.
Con un diseño radicalmente nuevo, un nuevo chasis en acero, nuevos tamaños, ágil pero más estable y cómoda, la Vespa Primavera ha renacido —impulsada por los motores ultra modernos y ecológicos de 50cc, 125cc de 3 válvulas y 150cc de 3 válvulas— con algunas de las soluciones estilísticas y técnicas de la Vespa 946, el modelo más prestigioso y avanzado tecnológicamente concebido.
La nueva Primavera está de vuelta en uno de los momentos más brillantes de la historia de la Vespa, el año que marcó el debut de la 946, que se presentó en el mercado americano con un lanzamiento que se llevó a cabo en Manhattan el 25 de octubre tras su introducción en Europa y Asia.
Esto es una confirmación de la extraordinaria progresión de la marca Vespa conseguida en los últimos diez años: desde 2004, cuando las ventas generales alcanzaron las 58 mil unidades, los números crecieron a 100 mil en 2006 y 165 mil Vespas producidas en 2012, un récord que está a punto de batirse en 2013.
En menos de diez años, de enero de 2004 a octubre de este año, se han vendido en todo el mundo un total de 1.207.827 Vespas.