La plataforma de e-commerce es crucial para el éxito de una tienda en línea

oracle-airplanes-itusersPor: Luke Allen, ejecutivo de cuentas de ATG SaaS

Lima, 4 de mayo del 2012.– Son las 12 del mediodía y llega una alerta al teléfono móvil. Avisa de que acaba de comenzar la venta de bolsas Chanel en el sitio de compras en línea, Gilt. Miles de sus más de tres millones de miembros acuden a la llamada en hordas en un intento de lograr la compra en esta tienda de artículos de lujo en oferta.

Es uno de los miles de sitios de comercio electrónico que pueblan hoy en día la red y que demuestran que las tiendas en línea son cada vez más importantes e incluso críticas para los ingresos de una gran cantidad de empresas.

A medida que se presta más atención a estos canales de venta en Internet, muchas de estas compañías con presencia online se están dando cuenta de que su plataforma actual de e-commerce es incapaz de soportar su crecimiento y las necesidades cambiantes del negocio.

Por ello, los directivos de estas empresas y los responsables de TI buscan aplicaciones más sofisticadas capaces de cumplir tanto sus necesidades actuales como futuras.

Elegir la mejor aplicación de comercio electrónico para el largo plazo puede ser complicado ya que resulta difícil basar una decisión en los requerimientos actuales y en unas condiciones de futuro todavía inciertas y vagas.

Además, a primera vista pareciera que las funcionalidades de un sitio de e-commerce son bastante elementales, casi un “commodity”: todos ofrecen un catálogo de productos con una función de búsqueda para encontrar los artículos deseados, todos incluyen carritos de compra o shopping carts, todos ofrecen promociones especiales como envíos gratuitos y transacciones gratuitas.

Sin embargo, detrás de esas funciones tan comunes y generalizadas se esconde toda una serie de condiciones  necesarias para que esas tiendas sean atractivas, funcionen como deben y respondan bien a altos volúmenes de transacciones en el largo plazo.

La diferencia de estas capacidades en una aplicación de e-commerce puede ser la clave entre un sitio exitoso y otro que fracasa.

Ante tanta oferta de aplicaciones de comercio electrónico que parecen compartir las mismas funciones y características al nivel más superficial, las verdaderas diferencias no son evidentes hasta que uno examine la letra pequeña. Por eso no debe tomarse a la ligera la elección de la plataforma que debe soportar este negocio cada vez más importante.

Entre los varios factores que deben tenerse en cuenta están la escalabilidad del sistema (¿es capaz de responder eficientemente a los picos repentinos de tráfico?), la versatilidad de su catálogo (¿es capaz de adaptarse con flexibilidad a un futuro crecimiento), el grado de control que tienen sus usuarios (¿se adapta a las necesidades de los distintos responsables involucrados en diferentes áreas de la empresa?),  el poder de las búsquedas (¿puede encontrarse fácilmente el producto que se busca?), la agilidad del sistema (¿puede adaptarse al comportamiento individual de un visitante concreto?), informes y análisis (¿ofrece la información necesaria para entender el negocio, manejarlo y tomar las decisiones correctas?), los estándares (¿se basa la aplicación en una plataforma estándar?), la integración (¿se integra la aplicación al resto de los sistemas y procesos de la empresa), la interoperabilidad (¿funciona la aplicación en una arquitectura orientada al servicio?) y las sinergias (¿apoya la aplicación a otros modelos de negocio más allá del e-commerce B2C?)

Oracle tiene una amplia experiencia en este campo y su tecnología está detrás de los sitios de e-commerce de algunas de las empresas más grandes del mundo, lo que demuestra que sus aplicaciones para tiendas online son más sólidas que el mismo cemento y ladrillo de las tiendas de siempre.