Nos preguntamos entonces, ¿para qué cerraron Megaupload?… Una cosa es proteger el legítimo derecho de la «Propiedad Intelectual» y la otra sólo emprender algunas acciones, pero no encarar el quid del asunto. Inclusive, escritores de la talla de Paulo Coelho, salieron a exponer su punto de vista y hasta a abogar por la descarga libre de sus obras.
Todo este barullo, sirvió para reforzar el Hacktivismo de «Anonymous» y por otro lado, endurecer las llamadas «Políticas de Privacidad» de los principales proveedores en Internet. Nos preocupa el intento de censura y como medio de comunicación, es nuestro deber defenderlo, pero por otro lado, también reclamamos que existan mejores mecanismos para extender el acceso a los contenidos «legítimos» y ponerlos al alcance de los usuarios.
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